Una de las primeras medidas de Amenofis IV (Akhenatón) fue privar al gran sacerdote de Amón de la administración de los bienes seglares (con esto pretendió separar las competencias religiosas de las estrictamentes políticas) pero esto sólo no bastaba para disminuir la influencia del clero de Amón había que romper con la religión de Amón y “crear” un nuevo culto con el que reemplazar al amonita: El atoniano el cual tenia esta doctrina:
En su origen designa el objeto “sol”, se puede emplear metafóricamente en lugar de Ra para hablar del astro del día considerado como potencia eterna y vivificante, según la tradición Ra reside en su disco.
La representación de Atón es el disco solar con los rayos que terminan en manos.
El sol Ra bajo el aspecto de Atón crea y recrea el mundo cada día, único objeto de culto el sol, visible por su único disco, del cual emana la luz, cercana bajo forma de único hijo, la predicación de Akhenatón fundamenta la moral y la ley
Nunca se había afirmado de manera tan rotunda el dogma de la divinidad del faraón.
Confianza romántica en la bondad de Dios, piedad entusiasta, lirismo espontáneo, rechazó el aparato mitológico en elogio de los dioses.
Los dioses proscritos: Amón, Mut (compañera de Amón) y (Diosa buitre), las pequeña divinidades locales no fueron afectadas por persecuciones.
Si bien esta religión tiene una tendencia monoteísta en realidad que se debería hablar de monolatría (adoración de un único Dios aunque admite la existencia de otros) o de henoteísmo (creencia en un solo Dios sin negar la existencia de otros.)
No necesita representación por medio de estatuas a las que rendir culto, está presente en todas las cosas, las ofrendas son directas (frutas, flores)
Su santuario no está más en un lugar oscuro si no en un patio descubierto en el cual el Dios visitaba en persona y bañaba con sus rayos.
El faraón es el pontífice supremo y también el profeta, sólo él conocía la doctrina, la interpretaba y la transmitía, (asistido por su reina Nefertiti, la cual esta presente en los relieves de la época al lado del faraón)
La antigua religión era en primer lugar funeraria, con una gran preocupación por el bien y el mal, en cambio la nueva religión no tenia ninguna preocupación moral. Atón era el único Dios creador, si Matt era su hija como lo había sido Ra esta representa la verdad y la justicia,
La otra gran idea es el amor a la naturaleza condicionada por el cuidado de libertad y culto del sol, la fuerza más importante de la naturaleza.
Para implantar este modelo tomó tres medidas:
1) cambiar su nombre de Amenofis a Akhenatón (el que agrada a Atón o el servidor de Atón), siguiendo su ejemplo, la mayoría de los funcionarios adoptaron un nombre atoniano.
2) Creó a 320 Km de Tebas una nueva capital: Akhet Atón (horizonte de disco solar), y trasladó allí su residencia, esto lo hizo en el cuarto año de su reinado.
3) Erradicar la presencia de Amón en la vida pública y cotidiana de los egipcios, agentes reales recorrieron el imperio para borrar esta nomenclatura en inscripciones, monumento, edificios (públicos o privados),
documentos oficiales.
Con estas medidas se buscaba restablecer el poder de la corona, no por la vía imperialista como sus antecesores, sino por ideológica.
Este nuevo concepto teocrático exigió también hombres nuevos al servicio del faraón, este extrajo de los círculos heliopolitanos o de círculos no pertenecientes a la vieja aristocracia. Aunque es dudoso que la reforma religiosa traspasará los marcos de la familia real, la corte y el clero, careciendo de apoyo popular.
En lo económico era preciso privar a los templos de Amón de su base económica en provecho de la corona para lo cual el faraón ordenó el traspaso de los bienes eternos al tesoro y los campos del Dios a la tierra del faraón.

Dentro de las tumbas se hallo el himno a Aton, el cual tiene muchas similitudes con el Salmo 104 del Antiguo Testamento.
HIMNO A ATÓN
¡Espléndido te alzas en el horizonte,
Oh, Atón viviente, creador de vida!
Cuando amaneces en el horizonte oriental,
llenas todas las tierras con tu belleza.
Eres bello, grande, deslumbrante,
elevado sobre todas las tierras;
tus rayos abrazan las tierras,
hasta el límite de todo lo que has creado.
Porque siendo Ra, alcanzas sus límites ,
y los has doblegado para tu amado hijo;
aunque estás lejos, tus rayos brillan sobre la tierra,
aunque cualquiera sienta tu presencia, tus rayos son invisibles.
Cuando te pones en el horizonte occidental,
la tierra queda en tinieblas, como en la muerte;
todos yacen en las habitaciones, sus cabezas cubiertas,
un ojo no puede ver a su compañero.
Ellos podrían ser despojados de sus propiedades,
aunque estén sobre sus cabezas,
la gente no se daría cuenta.
Todos los leones salen de sus guaridas,
todas las serpientes muerden ;
la oscuridad se cierne, la tierra está en silencio,
así como su creador descansa en el horizonte.
La tierra brilla cuando amaneces en el horizonte,
mientras resplandeces como Atón durante el día;
cuando disipas la oscuridad,
cuando ofreces tus rayos,
las Dos Tierras están en fiesta
despiertas y erguidas sobre sus pies,
tú las has levantado.
Sus cuerpos están purificados, vestidos,
sus brazos adoran tu aparición.
Toda la tierra se dispone a trabajar,
todos los rebaños pacen en sus pastos;
los árboles y las hierbas florecen,
los pájaros echan a volar de sus nidos,
sus alas saludan a tu ka .
Todo rebaño brinca sobre sus patas.
Todo lo que vuela y se posa,
vive cuando amaneces para ellos.
Los barcos van corriente arriba, y corriente abajo,
todos los caminos se abren cuando te alzas.
Los peces del río saltan ante ti,
Los peces del río saltan ante ti,
tus rayos están en el centro del mar.
Tú, quien haces crecer la semilla dentro de las mujeres,
tú, quien creas las personas del esperma;
quien alimentas al hijo en el vientre de su madre,
quien calmas apagando sus lágrimas.
Nodriza en el vientre,
dador de aliento,
para animar todo lo que creas.
el día de su nacimiento
tú atiendes sus necesidades.
Cuando el pollo está en el huevo, piando dentro de la cáscara,
tú le das aliento dentro de ella para insuflarle vida;
cuando lo has terminado,
para que pueda romper el huevo,
sale de su interior,
para anunciar su terminación,
caminando sobre sus dos patas sale de él.
¡Cuán grande es tu obra,
aunque escondido a la vista,
Oh, Dios Único junto a quien nadie existe!
Tú creaste la tierra según tu voluntad, tu sólo,
todos los hombres, todos los grandes y pequeños animales,
todas las cosas que hay sobre la tierra que caminan sobre sus piernas,
todo lo que vuela por medio de sus alas,
las tierras de Khor y Kush,
la tierra de Egipto.
Tú pones a cada hombre en su lugar,
tú satisfaces sus necesidades,
cada uno tiene su alimento,
calculas la duración de sus vidas.
Sus lenguas difieren en el idioma,
así también sus caracteres;
sus pieles son distintas,
para distinguir a las personas .
Tú provocas la inundación desde la Duat ,
tú la llevas cuando deseas
dar vida a los hombres,
pues tú los has creado para ti.
Señor de todo, quien trabaja para ellos,
Señor de todas las tierras, quien brilla para ellas,
el Atón del día, ¡grande en su gloria !
A todas las tierras lejanas, que haces vivir,
tú les has concedido el descenso de la inundación desde los cielos;
él crea olas sobre las montañas, como lo hace el mar,
para empapar sus campos y sus ciudades.
¡Cuán excelentes son tus obras, Oh, Señor de eternidad!
Una inundación desde el cielo para los extranjeros
y para todas las criaturas de la tierra que caminan sobre sus patas,
para Egipto la inundación viene desde la Duat.
Tus rayos alimentan todos los campos,
cuando brillas, ellos viven, ellos crecen para ti;
tú creas las estaciones para desarrollar toda tu obra:
el invierno para refrescarlos, calor para que te sientan.
Tú has creado el lejano cielo para brillar allí,
para contemplar toda tu obra,
tú solo, brillando en tu forma de Atón,
elevado, radiante, distante, cercano.
Tú creas de ti mismo millones de formas,
ciudades, pueblos, campos, el curso del río;
todos los ojos te observan por encima de ellos,
pues tú eres el Atón de las horas del día sobre lo alto.
Tú estás en mi corazón,
no hay nadie que te conozca,
excepto tu hijo, Neferjeperura el Único de Ra,
a quien has mostrado tus sendas y tu poder.
Todos aquellos en la tierra salen de tus manos cuando los creas,
cuando amaneces ellos viven,
cuando te pones ellos mueren;
tú eres el tiempo vital en todos tus miembros, todos viven gracias a ti.
Todos los ojos están puestos en tu belleza hasta que te acuestas,
todas las labores cesan cuando descansas en occidente;
cuando te levantas haces que todos se apresuren por el Rey,
todas las piernas están en movimiento desde que fundaste la tierra.
Tú los alzas para tu hijo quien proviene de tu cuerpo,
el Rey que vive en Maat el Señor de las Dos Tierras,
Neferjeperura, el Único de Ra,
el Hijo de Ra, quien vive en Maat, Señor de las Coronas, Akhenatón, grande durante su vida;
y la gran Reina a quien él ama, la señora de las Dos Tierras,
Nefernefruatón-Nefertiti, que viva eternamente.
1Bendice, alma mía, a Yahvé,
Yahvé, Dios mío, tú eres muy grande;
te has revestido de esplendor y majestad,
te has revestido de esplendor y majestad,
2te envuelves de la luz como de un manto.
Desplegaste los cielos como una tienda,
3construyes sobre las aguas tus altas estancias,
pone en las nubes su carroza
y camina sobre las alas del viento,
4hace de los vientos sus mensajeros
y del fuego llameante sus ministros.
5El que afirmó la tierra sobre sus cimientos
no vacilará por los siglos;
6del abismo como de un vestido la cubriste,
las aguas se pararon sobre los montes;
7a una amenaza tuya emprendieron la huida,
a la voz de tu trueno se precipitaron;
8se elevaron los montes,
se abajaron los valles,
al lugar que tú les señalaste;
9pusiste un límite que no sobrepasarán,
no volverán más a cubrir la tierra.
10Haces brotar fuentes en los valles,
que se deslizan entre las montañas;
11abrevan a todas las bestias del campo
y de los asnos salvajes sacian la sed;
12junto a ellas hacen su morada las aves del cielo,
hacen oír su voz entre sus ramas.
13Riegas los montes desde tus estancias,
se sacia la tierra con el fruto de tus obras;
14haces crecer la hierba para el ganado
y el pasto para el servicio del hombre.
Para que saque el pan de la tierra,
15y el vino que alegra el corazón del hombre;
para que hagan brillar la faz con óleo
y el pan refocile el corazón del hombre.
16Se sacian los árboles de Yahvé,
los cedros del Líbano que él plantó;
17allí anidan los pájaros, allí, en sus copas
tiene la cigüeña su casa;
18las montañas altas son para las gamuzas,
las rocas madrigueras para los damanes .
19Hizo la luna para señal de los tiempos,
el sol conoce su ocaso.
20Pones las tinieblas y llega la noche,
en ella se agitan todas las bestias de la selva.
21Rugen los leoncillos por su presa
y buscan de Dios su alimento.
22Nace el sol, ellos se retiran,
para echarse en sus cubiles.
23Sale el hombre a su trabajo
y a su faena hasta la tarde.
24Cuán numerosas son, Yahvé, tus obras,
todas las hiciste con sabiduría,
llena está la tierra de tus criaturas.
25He aquí el mar, grande y vasto en todos los sentidos,
allí un pulular sin número
de animales pequeños y grandes;
26allí se pasean las naves,
el Leviatán que tú formaste
para que en él retozase.
27Todos esperan de ti
que les des a su tiempo el alimento;
28se los das, ellos lo recogen,
abres tú la mano, se sacian de bienes;
29escondes tu rostro, quedan aterrados,
retiras su aliento, mueren y vuelven a su polvo.
30Envías tu soplo y son creados
y renuevas la faz de la tierra.
31Sea gloria a Yahvé para siempre,
32A él que mira la tierra y tiembla ,
toca los montes y humean.
33Cantaré a Yahvé durante mi vida,
salmodiaré a mi Dios mientras exista.
34Que mi poema le sea agradable,
yo me gozo en Yahvé.
35Que los pecadores desaparezcan de la Tierra
y no existan ya más impíos.
y no existan ya más impíos.
¡Bendice, alma mía,
a Yahvé!
Alleluya.